Los carabineros tienen el dulce y arriesgado trabajo de alimentar a esas mascotas que quedaron a merced de los caprichos del Chaitén.
Esta es una de las tantas, pero no muchas,notas que me dibujan una sonrisa,no de alegría sino de esperanza.
Poné el dedito aquí y verás la nota completa del diario La Cuarta de Chile