*Martín Basso se quedó con la pole position en una clasificación del TC2000 que dio para todo. Despistes con golpes, infracciones dudosas y algunos malentendidos en una tarde a puro calor en Potrero de los Funes. Ortelli tuvo problemas de caja y mañana largará último. Pechito López, tercero detrás de Pernía, puede liquidar el torneo.
En una tarde clasificatoria que tuvo ribetes para todos los gustos, Martín Basso se quedó con la pole position en el circuito de Potrero de los Funes y mañana largará desde el cajón de privilegio en la gran final que se pondrá en marcha desde las 11 en el huso horario del oeste.
El piloto del equipo Ford YPF clavó 2m 32s 47/100 en la instancia que agrupó a los diez más veloces de la clasificación (esta vez hubo un solo corte, a diferencia de los dos usuales) y relegó a Leonel Pernía (Honda Petrobras) a la segunda posición. El Tanito, que golpeó el auto muy duro en el tren delantero tras establecer su mejor tiempo, quedó a 12/100 del poleman, en tanto que José María López (Honda Petrobras) se ubicó tercero a 41/100 de lo mejor.
Así, Pechito obtuvo un gran resultado ya que Guillermo Ortelli (Renault LoJack Team), uno de sus principales rivales en la pelea por el título, sufrió un inconveniente con la caja y ni siquiera pudo cerrar un giro veloz. De esta manera, el saltense partirá último mañana con lo cual se esfuman sus chances en un campeonato que dominó a su gusto hasta la mitad del calendario y que ahora increíblemente se le escapa.
Una gran tarde tuvo Ricardo Risatti (Chevrolet Elaion), quien obtuvo su mejor clasificación en la categoría. Caíto fue cuarto por delante de su compañero Christian Ledesma, en tanto que Gabriel Ponce de León (Ford YPF) y Juan Manuel Silva (Honda Petrobras) se ubicaron detrás. El Pato, que comparte el segundo puesto en la tabla de puntos con Ortelli (ambos a 13 de López), es al parecer el único que puede aguarle la fiesta a su coequipier cordobés. Habrá que ver qué resuelven Víctor Rosso y Leonardo Monti en la definición de la corona entre dos de sus pilotos.
Josito Di Palma (DP-1 Team), Marcelo Bugliotti (ofuscado por una falla que le impidió estar mejor ubicado) y Alejandro González (DP-1 Team) completaron los diez de adelante en una última instancia que durante varios minutos contó con once participantes en lugar de la decena ideal.
¿El motivo? Matías Rossi (Renault LoJack Team), que había sido décimo en la primera salida, fue retrasado en ese clasificador por una falta en pista (pisó una zona verde con las cuatro ruedas). Cuando los comisarios deportivos le comunicaron su resolución a Edgardo Fernández, el responsable del Rombo (que no tenía su radio encima) se vio impedido de hacerlo saber rápidamente al resto de sus muchachos que aguardaban en el box. Conclusión: el equipo mandó el auto a pista con la consecuente exclusión que ello significó. Después de todo el lío que comprendió el malentendido, se resolvió que el de Del Viso partirá mañana 12º.
La misma infracción cometieron en la primera instancia clasificatoria Carlos Okulovich y Leonel Pernía, los dos del equipo oficial Honda, aunque mientras giraban a baja velocidad, es decir, no en vuelta rápida. A ambos les correspondía la misma sanción que a Rossi, o sea, el retiro del tiempo del giro con infracción. Sin embargo y en una confusión, las autoridades suprimieron a ambos sus giros más veloces. Los CD reconocieron la falla y pidieron disculpas, aunque ya sin poder deshacer su resolución. Pernía safó porque una marca anterior ya lo había metido entre los diez, pero el de Oberá perdió la chance de luchar por la pole y mañana partirá 11º la carrera. Creer o reventar.
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