Tuesday, April 22, 2008

Apuntes de Neustadt

Esto salió en Ambito Financiero, 2 de abril de 2008.
A pedido del que me lo mandó por mail tras no creer lo que leía.
Publicar esto no sig ser facho y el que lo crea es porque jamás siguió ninguno de mis blogs.


Apuntes de Neustadt

Oligarquía: «Conjunto de algunos poderosos que se aúnan para que todos los negocios dependan de su arbitrio». (Diccionario de la Real Academia Española.)

CARTA CERRADA

A la señora del rencor indefinido:

Emocionante. Llegar en helicóptero y, abajo, «su pueblo», esperándola. ¿Alguna vez lo soñó? Una monarca es la que puede poner retenciones sin Parlamento. Les ganó a Perón y a Evita juntos. Qué placer ver el desfile de micros. Cerca suyo, «Luisito» D'Elía, impecable. En la ruta, convicciones; en la plaza, extras pagos.

Le confieso que tuve miedo cuando empezó el discurso: «Vienen a defender al pueblo argentino». ¿Quién lo ataca, me pregunté?

Evoqué los incendios de iglesias, del Jockey, del diario «La Prensa». El 5x1 resonó más que nunca. Perdóneme. Me asustó mucho. Su voz y su cara. ¡Qué contradictoria es usted! Tras la alarma, pidió alegría.

Acusó a los periodistas de racistas, ¿o entendí mal?

Invitó al rencor y pidió el reencuentro. El Néstor la aplaudía. ¡Qué lindo que la gente se quiera! ¿La cuota de discurso ya terminó?

Le agradezco tanto: por usted aprendí lo que es el campo. Cuánto produce. Lástima: los irritó.

La historia está pariendo: los muchachos del corte son jóvenes con computadoras. Más puros, porque vienen de la tierra. Por ahí sale nuestra nueva clase política. Ruralistas urbanos. Saben de tecnología, hablan con Chicago. No doblan el lomo como sus padres. Fabrico una nueva esperanza. Estos cortes y los cacerolazos se consiguen sin pagar. ¿Usted se dio cuenta?

Soy liberal. ¡Más que nunca!: viéndolos gobernar,me convencieron para siempre. Gracias. Nunca un liberal ganó una elección. Así que no nos eche la culpa. En estos 25 años presidieron el país: Alfonsín, Menem, De la Rúa, Puerta, Rodríguez Saá, Duhalde, su dignísimo esposo y usted. Radicales y peronistas. La Argentina, demacrada.

Nueve millones de votos sobre 40 millones de argentinos. ¿De qué legitimidad habla?

Su esposo, con sólo dos millones de votos, y perdiendo con el «miserable» Menem, se hizo dueño de todo el poder.

¿Qué siente cuando ve a Hillary Clinton y a Obama recorriendo todos los Estados Unidos, con debates intensísimos, para suplicar el voto del pueblo?

En un cuarto, usted le dijo: «¡Sí!» y su esposo la proclamó. ¡Carrera fácil!

No abuse de los mansos.

Si le gusta abrir tumbas, abra todas, no algunas.

Seguir leyendo