Independiente no jugó mal, pero se equivocó y lo pagó muy caro

*Copa Sudamericana
Por errores y desconcentraciones propias, Goiás le metió los dos goles (Moura y Neto) al Rojo, que complican pensando en la revancha del miércoles próximo. Silvera, expulsado, se lo pierde.
Fue un momento, dos jugadas, el sector del tres, cuatro que no supieron qué hacer, cinco con el arquero (que tampoco llegó), seis segundos de desconcentración de Marque en cada una, siete minutos fatales...
Se puede enumerar, así, linealmente, lo que le pasó a Independiente en Goiania. Se puede contar, así, fácilmente, por qué se trajo esta derrota 2-0 en la final de la ida de la Copa Sudamericana.
Porque no la pasaba mal el Rojo, al contrario: estaba bien parado, prolijo, ordenado. Pero pasó lo que no tenía que pasar. Y pagó caro. Muy caro.
Iban 14 minutos del primer tiempo cuando Mareque quiso salir, no la despejó, lo atoraron y perdió: su rebote cruzó toda el área grande y le quedó servido a Moura, que definió ante la estéril salida de Hilario Navarro.
Y sólo pasaron siete más, hasta los 21, para que Goiás volviera a aumentar: otra vez una jugada por el lado del defensor ex River sirvió de tierra fértil para gestar un centro que -sí, otra vez- cayó al segundo palo. El que definió fue Neto. Y gritó, festejó, gozó el 2-0.
Después, ahí sí, a defenderse. A cumplir a rajatabla el plan que el DT había craneado, a imitar a ese pizarrón que decía “a esperar y salir de contra”, flecha más, flecha menos.
Y así fue. Independiente siguió buscando, sin ser demasiado punzante pero intentó. Aunque todo se le nubló más aún cuando, lejos de descontar, Andrés Silvera se fue expulsado por un supuesto codazo tras un forcejeo. Hubo foul, sí, pero no golpe determinante de tarjeta roja.
Todavía con diez, el equipo del Turco Mohamed buscó y acorraló a un tímido conjunto brasileño. Pero no pudo contra ese hombre de más y contra esos ocho que se quedaron adentro o bien cerquita del área grande.
Ahora, el Rojo deberá esperar y pensar cómo revertir esto. Tiempo tiene, no mucho pero le deberá alcanzar: la revancha es el miércoles próximo en el estadio Libertadores de América, justamente. ¿Podrán los rojos revertir este global, quedarse con al Sudamericana y meterse en la Libertadores 2011?

-Fuente: Minuto Uno