Medición privada. La imagen de Cristina se derrumbó 30 puntos en 2008. Sólo en abril, la opinión positiva sobre la Presidenta descendió 10%. Apenas un 26% aprueba a la mandataria. La imagen de Néstor sigue igual.Cuando el ex ministro de Economía Martín Lousteau anunció el aumento de las retenciones allá por principios de marzo, el gobierno de Cristina Fernández seguramente no imaginó las consecuencias de dicha medida. En una encuesta difunda esta tarde, se conoció que la imagen de la Presidenta descendió 30% en lo que va de 2008.
De acuerdo a una investigación de la consultora Poliarquía, la imagen positiva de Cristina Fernández de Kirchner es de apenas 26% (6% "muy buena" y 20% "buena"). El informe señala que la opinión positiva sobre la Presidenta descendió, sólo en el último mes, 10 puntos porcentuales, mientras que bajó un total de 30% en todo el año.
“Al conflicto con el agro se sumó la creciente preocupación que genera el proceso inflacionario en la sociedad”, afirmó Alejandro Catterberg, director de Poliarquía Consultores. En ese sentido, el consultor añadió que la desaprobación de la economía ascendió a 61% de la población, “23 puntos más que en marzo”, agregó.
Néstor sigue igual. Pese a que la imagen de Cristina descendió -sobre todo “entre los jóvenes, los ciudadanos con educación secundaria y los habitantes del noreste argentino”-, la investigación revela que el conflicto que el Gobierno mantuvo con los productores agropecuarios no afectó a la imagen del ex presidente Kirchner.
“En los últimos dos meses el ex Presidente sólo perdió 6 puntos de imagen positiva (y 15 puntos desde enero)”, señaló Catterberg. De esta manera, el santacruceño -de fuerte intervención en el conflicto con el campo- se mantiene como uno de los dirigentes “mejor evaluados” del país, señala la investigación.
La encuesta manifiesta, por primera desde que los Kirchner llegaron a la Rosada, un “desacople” en la imagen de cada integrante del matrimonio. Pese a que el ex presidente tuvo altibajos durante su Gobierno, nunca sufrió una caída tan abrupta como la que ahora padeció Cristina Fernández.
Creo que aparte de su incapacidad para gobernar, irrita verla vestida como un maniquí de alta costura y pintada como una vedette de la calle Corrientes, además de verla haciendo turismo por el mundo, mientras la gente no la está pasando bien.
Fuente: Perfil.com
