En la prueba han participado 120 estudiantes de la Universidad de Liverpool. La mitad de ellos consumían chicle de manera habitual, y los demás querían adelgazar. Se demostró que masticar chicle entre dos y tres veces al día puede ayudar a perder entre 25 y 36 calorías diarias.
Los expertos dicen que los sabores dulces de los chicles y el movimiento que realizamos al mascar ayudan a controlar "el ansia" que nos lleva al frigorífico.
Lo que no dice este estudio es la incidencia del consumo de chicles en la salud bucodental de los consumidores.
20minutos